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Mostrando entradas de agosto, 2008

El Pozo Negro, Sierra de la Demanda, Burgos. (18/ago/2008)

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El día de Santa Elena del año de gracia olímpico pekinés, aprovechando la estancia veraniega en la Sierra de Cameros, cuatro esforzados mineros, Arantza, Ernesto, Arturo y José, nos aplicamos a la noble tarea de remontar el río Tirón hasta sus fuentes, que son la laguna llamada el Pozo Negro, en la parte burgalesa de la Sierra de la Demanda, en el término de Fresneda de la Sierra, un camino que podemos considerar de Málaga, pero por allí por la parte de Burgos. Esta era una excursión que Arturo llevaba deseando hacer varios años, desde que cayó en sus manos un folleto de promoción de la Sierra de la Demanda , donde se mencionaba el Pozo Negro. Aunque desde nuestra base tuvimos que conducir durante dos horas, el desplazamiento fue totalmente merecido, porque recorrimos una zona preciosa, muy bien conservada, y de vegetación exhuberante, en especial el hayedo de la segunda mitad del trayecto. Seguir Leyendo Como recompensa final, los habituales nos dimos un rápido baño en la laguna, cuya

Sierra Nevada. Trevélez (27, 28 y 29/junio/2008)

Incluso con más retraso del habitual, aquí está la entrada de la última excursión, el fin de semana anual de cierre de temporada en Sierra Nevada. Esta vez escogimos la vertiente sur, con base en Trevélez, para hacer dos excursiones bien distintas. La primera, subir a Siete Lagunas aproximándonos desde Capileira y bajar hasta Trevélez, y la segunda, recorrer uno de los tramos del GR-7, el que va entre Trevélez y Busquístar. Éramos 14 los caminantes de Málaga: los autores Ernesto, Arantza, Teresa, Lola Gálvez y Semi, y Arturo, los meritorios Lola Peña, Pepe Caballero, Manolo, Luis Torremocha, Fausto, Lola Gómez y José María, y la hija de Lola Gómez, Almudena, como cara nueva de la semana. El primer día Pepe Terrón ofició de anfitrión, pero compromisos personales le impidieron compartir con nosotros la salida del domingo. El sábado por la tarde disfrutamos de la visita de Alberto Cuevas y su esposa, Isa, que también tenían otros compromisos por los que no pudieron quedarse el domingo, dí